En el primero de los relatos cortos que conforman La muerte de Ulises, de Petros Márkaris, el creador del comisario de policía griego Kostas Jaritos, el autor, como si contemplara la nueva nómina de columnistas del diario AS, observa, por boca del protagonista del cuento, a la sazón titulado «El asesino de un inmortal»:
En este país, señor comisario, los que intentan triunfar sin enchufes ni contactos son asesinos en potencia.
Asimismo Jaritos, que es el narrador del cuento, lo termina como si a su vez describiese el efecto de este texto cuya única razón de ser es la de su hora de nacimiento, 23:45, y su día, 12 de agosto del año 2019:
Nuestra retirada pasa inadvertida.