Hoy, en el Senado, el presidente Sánchez ha declarado: «Cataluña es la única comunidad autónoma del país con un Estatuto que no fue aprobado por la sociedad catalana y ese es un problema político que tenemos que resolver».
La verdad es que si las palabras ya no significan nada en nuestra época, parece que los hechos, ciertamente, tampoco. Inauguramos una nueva época.
Noticia de hace 12 años:
El 73,9% de los votantes catalanes ha respaldado el nuevo Estatuto, aunque la participación no ha superado el 50% esperado y deseado por el Gobierno. La Generalitat, CiU, PSC e ICV se han felicitado por una victoria que, según Maragall, ha sido «rotunda e inapelable».